Melvin Sena, director de Hackeandoelsistema.net, es una figura que incomoda a muchos en el ámbito político y empresarial dominicano, en especial en Santo Domingo Este. Su actitud, percibida como provocadora y desafiante, no es gratuita ni producto del azar; está profundamente fundamentada en una visión crítica sobre la realidad social, política y económica que atraviesa la República Dominicana.
Sena ha ganado notoriedad no solo por sus agudos comentarios, sino por su capacidad de expresar lo que muchos prefieren evitar: la desilusión de una juventud cada vez más conservadora y desencantada con los ideales progresistas que, según él, han perdido todo sentido común.
El Desencanto del Progresismo
En sus análisis, Melvin Sena expone con claridad que lo que en su día representaba progreso, hoy simboliza retroceso.
Las corrientes ideológicas que abogan por un feminismo que empodera a la mujer a través del victimismo, o que promueven un lenguaje inclusivo que prioriza la forma sobre el fondo, son para Sena una distracción de los verdaderos problemas del país. En su opinión, estas ideologías no solo son artificiales, sino que además generan inestabilidad social y mental, al imponer una forma de pensar que está desligada de las realidades cotidianas de los dominicanos.
Melvin considera que el hombre es ridiculizado por el simple hecho de ser hombre, y que a la mujer se le engaña con un falso empoderamiento feminista que no resuelve los problemas estructurales. En lugar de abordar el desarrollo económico o educativo de manera efectiva, se están imponiendo debates triviales que, según él, no tienen relevancia alguna en la mejora de la calidad de vida de la mayoría.
Conservadurismo Emergente y Juventud Desencantada
El director de Hackeandoelsistema.net también señala una tendencia clara en la juventud: un creciente giro hacia el conservadurismo. Para él, esto es consecuencia directa de la decepción que muchos jóvenes sienten con los discursos progresistas, que parecen estar más enfocados en imponer agendas ideológicas que en resolver los problemas reales. Los jóvenes dominicanos, afirma Sena, están cada vez más hastiados de una política que, en lugar de ofrecer soluciones económicas y laborales, se ocupa de temas como el «lenguaje inclusivo» o la contratación basada en cuotas de género en lugar de talento.
El enfoque de Sena refleja su convicción de que «tiempos difíciles crean hombres fuertes», una frase que él usa para justificar el aumento de jóvenes que están optando por posiciones más conservadoras. La realidad económica del país, marcada por una crisis que afecta principalmente a las nuevas generaciones, ha hecho que muchos se den cuenta de que las políticas progresistas no han proporcionado los resultados que prometían.
El Estancamiento de la República Dominicana
Melvin Sena va más allá del análisis cultural y social; también señala a los culpables del estancamiento económico de la República Dominicana.
Desde su perspectiva, los políticos dominicanos están más interesados en mantenerse en el poder que en promover un verdadero desarrollo para el país. Las promesas de cambio y progreso se han convertido en vacías palabras de campaña, y los empresarios, aliados con las cúpulas políticas, continúan beneficiándose de un sistema que privilegia a unos pocos y deja atrás a la mayoría.
Además, Melvin destaca el papel de las presiones internacionales, que según él, no han hecho más que agravar la situación. Organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Banco Mundial han impuesto condiciones que limitan la soberanía económica del país, mientras que el manejo del problema haitiano sigue siendo una carga innecesaria para la República Dominicana.
En sus artículos y análisis, Sena sostiene que la República Dominicana no puede avanzar si sigue cargando con el peso de Haití, un problema que no es suyo pero que ha sido dejado sobre sus hombros. Esta carga, sumada a la permisividad de la sociedad dominicana y la corrupción endémica, hace que el país siga estancado en un ciclo interminable de subdesarrollo.
La Crítica que No Gusta
La postura de Melvin Sena, aunque respaldada por muchos jóvenes desencantados, es sumamente incómoda para el establishment político y empresarial. Hackeandoelsistema.net se ha convertido en una plataforma de denuncia y crítica que expone lo que muchos prefieren ocultar. En un país donde los medios de comunicación tradicionales están, en su mayoría, alineados con intereses particulares, la voz de Sena se ha levantado como una alternativa disruptiva y necesaria.
Su crítica no solo incomoda porque señala lo que está mal, sino porque invita a reflexionar sobre el camino que el país ha tomado. En un contexto donde los debates parecen centrarse más en lo superficial que en lo esencial, la actitud de Melvin Sena se convierte en un llamado a retornar a lo básico: sentido común, meritocracia y un enfoque real en el desarrollo económico y social del país.
Melvin Sena no busca agradar, y es precisamente esa característica lo que lo hace tan efectivo. Su rechazo a las corrientes progresistas, su defensa de un conservadurismo emergente entre los jóvenes, y su crítica frontal a la clase política y empresarial dominicana, lo convierten en una de las voces más relevantes y provocadoras del municipio de Santo Domingo Este.
A través de Hackeandoelsistema.net, Sena seguirá incomodando, porque su compromiso no es con los poderosos, sino con la verdad y con una juventud que busca soluciones reales en tiempos difíciles.